Vecinos de Los Naranjos se movilizan en contra de la estación transformadora
04.07.2012 - 20:48 hs
Los vecinos fundamentan que líneas eléctricas o transformadores, aún por debajo de los límites que se consideran inocuos, provocan modificaciones celulares y en el ADN con “claros indicios de riesgo para la salud”
Luego del análisis del estudio de Impacto Ambiental provisto por EJESA, los vecinos del Barrio “Los Naranjos”, docentes de la UNJu y Escuela Pucarita, acompañados padres de alumnos y alumnos auto-convocados de la Facultad de Ciencias Agrarias se movilizaran este mediodía en contra de la instalación de la estación transformadora de energía en los predios de la empresa EJESA.
La comunidad que trabaja estudia o vive en las inmediaciones de Independencia 60 o de la calle Ing. Italo Palanca solicitan la suspensión de obra y su reubicación.
Los vecinos fundamentan su pedido en el informe de “impacto Ambiental” para el punto Anexo II Parámetros Ambientales, el que “no menciona ni tiene en cuenta lo establecido por la norma” en lo referido al punto 4 la que fija que “el proyecto de un sistema de transmisión o distribución, como de cualquier otra obra, no puede prescindir de considerar el daño potencial que pueden originar al medio ambiente que lo circunda.
En forma concreta ocupara un espacio originando perturbaciones al ambiente natural y social”.
Además, los vecinos sostienen que en el análisis de las alternativas de obra deberán considerarse los siguientes aspectos:
- En zonas pobladas, se deberá respetar la trama urbana y tratar de utilizar espacios públicos no destinados a parques, lugares turísticos o recreativos para la comunidad. Se sugiere el alejamiento de predios destinados alojar o realizar actividades tales como escuelas, hospitales, hospicios, geriátricos, etc.
El estudio toma “valores” de densidad y intensidad de campo que considera “razonablemente alcanzables”. Sin embargo, los vecinos aseguran que dichos estudios “no aclaran que estos son valores experimentales en constante modificación a partir de las investigaciones científicas, las que demuestran claramente que la exposición a las radiaciones de teléfonos móviles y líneas eléctricas o transformadores aún por debajo de los límites que se consideran inocuos provocan modificaciones celulares y en el ADN con claros indicios de riesgo para la salud”.
“Los estudios epidemiológicos demuestran una clara relación entre los cánceres y otras enfermedades con las exposiciones a campos magnéticos, situación que no puede ser ignorada. Por rara casualidad o porque la resolución es del año 1998, estos especialistas no fueron consultados”, afirman en un comunicado de prensa.
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